Otra de
María del Carmen ex presidenta del Congreso
La congresista por Acción Popular y expresidenta de la Mesa Directiva, María del Carmen Alva, volvió a dar ayer otra muestra de su perfil impulsivo racista al agredir a la legisladora de Cambio Democrático Isabel Cortez, ex trabajadora de limpieza pública.
Esta es la lacra que nos gobierna y que nos avergüenza- Nunca antes hemos sido testigos de hechos como el mostrado por la ex presidenta del Congreso que después de todo no tiene por qué llamarnos la atención por no ser la primera ni será la última que se comparta achorada como si estuviera en los barracones. Por tal motivo, a un ciudadano común y corriente, la palabra Congreso le causa indignación, cólera, por albergar serviles vasallos de los grupos de poder con sueldos que son un insulto a la pobreza.
Por ende, por su contenido reflexivo posteamos la nota periodística publicada como Editorial el 12 de agosto de 2022 por
EDITORIAL Diario
UNO: Alva «¡No te metas, chola de m….!»
«Todas son iguales. A estas cholas les das un poquito de
confianza y se te suben a la espalda. Por eso, la única forma de tratarlas es a
la mala. Fíjate lo que ha hecho esta igualada. La tarada de la Norma Yarrow se
puso a decirle a los Niños de mi partido que se vendían por un plato de
lentejas, cuando todos sabemos que cuestan mucho más caro. Ahí no más, el niño
Darwin Espinoza se picó y quiso pecharlo a mi correligionario Wilson Soto.
Claro que Soto le había dado un empujón por la espalda, qritándole que se vaya
del partido. Yo me acerque a felicitarlo, y ¡zas!, aparece la barredora Isabel
Cortez a quien nadie había invitado.
– Tranquilo señorcito, papay, ya va a pasar, tranquilo, le dijo
la india, ofreciéndole un plato de lentejas más.
El idiota de Soto creyó que era un aumento de la coima y casi se
va con la Cortez, pero en realidad lo estaba invitando a un puesto de
agachaditos en la calle Tigre. Ahí no más, con el refinamiento del Reina de los
Ángeles y de la Universidad de Lima, le dije «Oye chola de mierda, no te metas
en mi bancada anda a sentarte con los pezuñentos que son iguales que tú». Pero,
la huevona en lugar de hacerme caso, se me puso brava.
– Señora, no estamos en tu partido, si no en el Congreso yo
tengo derecho a apoyarlo al colega. Aquí todos somos iguales.
O sea que esta zarrapastrosa trabajadora municipal se cree igual
a Soto, e igual… a mí. Ahí sino pude más, la agarré del brazo para aplicarle un
buen lapo en la cara curtida, cuando el cojudo del doctor Bustamante me jaló y
no me dejó chantarle mi marca. Luego se armó un despelote, y todos se hacían
los dignos. Pero la verdad es que yo estoy acostumbrada a mechonear a mis
empleadas para que trabajen mejor, y nadie dice nada. En cambio, aquí quieren
que le pida disculpas a la indígena que generó el incidente».
Tras conocer estos hechos, otros cholos congresistas ya han
pedido una sanción para la Alva, por agresora y por racista. Ahora, la
presidenta Camones enfrenta la disyuntiva de darle curso o no, es decir de
convertirse en Lady I o en María del Carmen II.
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