Aún conservo en la retina el infeliz
comportamiento de la presidente del congreso con los periodistas al extremo de comportarse
como nos tiene acostumbrado la congresista Patricia Chirinos miembro de la
junta directiva que preside la mencionada Narria del Carmen Alva.
Nos
gustaría ver a la mencionada presidente indignada, brutalmente dura con sus
colegas que blindan corruptos y toman decisiones como el de oponerse a la Reforma
universitaria cuyo único objetivo es buscar mejorar la calidad de la enseñanza
superior venido a menos como lo demuestran las denuncias que se vienen
difundiendo a través de la prensa nacional e internacional relacionada con la
calidad de la enseñanza.
La Sra.
presidenta del congreso tiene que aprender a controlar su lengua y a dominar sus
impulsos. No puede actuar como lo hizo con los periodistas que acudieron al congreso
a cumplir con su misión periodística.
¿Le hace algún bien aquí o fuera el comportamiento mostrado por la mencionada presidenta del congreso que no hacen más que provocar reacciones airadas de la ciudadanía al extremo de pedir su renuncia??Habría que recordarle en primer lugar a la Sra. presidente del congreso que no puede comportarse como lo hizo con los hombres de prensa cada vez que se le exige cumpla con su obligación que le demanda el cargo.
Habría que recordarle en segundo lugar a la Sra. presidente del congreso que por su condición de presidenta del congreso es una persona con responsabilidades que le impide ser protagonista de infelices pachotadas.
Habría que recordarle en tercer lugar a la Sra. presidente del congreso que por el cargo que desempeña esta allí para encausar todas sus energías posibles en la búsqueda del bienestar y progreso del pueblo que lo eligió y no para defender los interese de los monopolios y oligopolios, madre de todos nuestros males.-