Vacancia del presidente Castillo con derramamiento de sangre
Milagro Juárez escribía: El Congreso puede vivir en tensión
con el ejecutivo ¿Pero acaso son capaces de hacerlo también, manchándose las
manos con sangre? Con sangre de peruanos, que se movilicen, buscando poner
freno al deterioro político.
En el Peru se está poniendo de moda la palabra matar, así lo
dio entender las expresiones del congresista Jorge Montoya que dijo que la
vacancia de Pedro Castillo iba a “tener su cuota de sangre”. ¿Qué está pasando
en el Perú? ¿Acaso para el incapaz y y
cobarde Congreso no es suficiente lo que viene ocurriendo en nuestro país en
momentos que venimos enfrentado una grave crisis política dentro de una crisis económica
social tiene una agenda cuyo único punto único punto es vacar o inhabilitar al
presidente Castillo, sin meditar sobres las graves consecuencias que pueden
derivarse de la que terminaremos arrepintiéndonos? Lo que está claro es que la
guerra está declarada, que suenan tambores de guerra y que en cualquier momento
la pradera terminara incendiándose.
No esta demás recordar que desde el 2016 en que PPK terminara
renunciando hemos tenido 4 presidentes. La situación no ha mejorado, ha ido
empeorando. Hoy enfrentamos una nueva vacancia, la tercera sustentada en el hecho
que a la tercera será la vencida. De fracasar como está prevista por que el Congreso
no cuenta con los 87 votos que necesita para vacar al presidente Castillo, vendrán
otras tal vez con la monserga que no hay quinto malo. Y así sucesivamente.
En este marco y contexto, el futuro de nuestro país se
torna incierto. Al final los más perjudicados serán los mismo de siempre, los
sectores más pobres en particular aquellos que tienen su vivienda sobre pircas
en la falda de los cerros sin los servicios elementales de agua y desagüe y con
niños que se van a la cama con el estómago vacío. Ojalá reflexionen y recuerden
que fueron elegidos para hacer propuestas que mejoren la calidad de vida de los
peruanos que no está ocurriendo.