Está circulando en la rede sociales imágenes de masivas reuniones de personas presuntamente convocadas por el alcalde de Carabayllo Marcos Espinoza que de ser cierto, estaría incurriendo en presunto delito por poner en grave riesgo la salud y la vida de las personas convocadas.
Se le considera delito ya que nos encontramos a portas de
una tercera ola que ha sido declarada expresamente por la autoridad competente
y, con base en ella, se han dispuesto medidas prohibitivas respecto a las
reuniones como la que presuntamente viene convocando el mencionado alcalde.
Lo peor es que, como lo dan a conocer los vecinos, detrás
de estas masivas convocatorias esta el lanzamiento como candidato a la alcaldía
del hermano del mencionado alcalde.
Lo grave es que, de ocurrir una emergencia sanitaria
provocada por la tercera ola, terminaran echándole la culpa al presidente Pedro
Castillo. Las aclaraciones no deben de esperar.
En ese sentido, la autoridad municipal debe ser
consciente que, además de faltas administrativas, podría incurrir en
responsabilidad penal si es que se realiza una convocatoria durante esta
emergencia sanitaria que enfrentamos. Las consecuencias, inclusive, serán
diferentes si es que el que promueve una reunión está infectado o no con
COVID-19.
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